(Historia) Las Fuerzas de Liberación Nacional, el antecedente del EZLN (México Armado, Laura Castellanos)
Diciembre 30, 2013
Publicado
por guerrillacmx
Castellanos, Laura. México armado.
1943-1981. México, Era, 2007
1975,
la Dirección Federal de Seguridad había ido desapareciendo una a una las
organizaciones revolucionarias armadas activas. Las Fuerzas d Liberación
Nacional se replegaron y se organizaron en torno a una estrategia de largo
alcance. Salvo un contacto con el casi extinto Movimiento de Acción
Revolucionaria, no tienen relación con las otras organizaciones
político-militares, aparentemente continúan al margen del escenario
revolucionario de la época.
A mediados de 1975 las FLN sufren un golpe. Habían logrado reorganizarse a
pesar de duro choque con las fuerzas de seguridad, en una casa de seguridad en
Nepantla, Estado de México, ocurrido un año atrás.
Llevaban cinco años de crecimiento silencioso. Sólo contaba con un
tropiezo, cuando por una confusión sus militantes libraron un tiroteo contra la
policía en una casa de seguridad en Monterrey, en el verano de 1971.
El núcleo original provenía de un grupo de cinco jóvenes regiomontanos
encabezados por César Gérman Yáñez Muñoz, que venía de una familia marcada por
el movimiento ferrocarrilero de los años cincuenta y por perseguidos políticos
opositores a Fulgencio Batista en Cuba. César Germán ingresó a la Facultad de
Derecho y su hermano menor a la Facultad de Arquitectura.
En 1969 buscaron al periodista Mario Menéndez de la revista Por qué? La revista era famosa en los
círculos de estudiantes de izquierda por publicar entrevistas con guerrilleros
latinoamericanos. El periodista les confió que quería crear un grupo armado con
el nombre Ejército Insurgente Mexicano (EIM). Para entonces Menéndez ya había
reclutado jóvenes de Yucatán, Tabasco y Veracruz a quienes entrenaba en un
campamento situado entre Chiapas y Tabasco.
(El Ejército Insurgente Mexicano fue creado en 1968 por Mario Menéndez y el
químico Ignacio González Ramírez. El 17 de septiembre de 1969 estallaron cinco
explosivos en edificios públicos y de medios de comunicación. El 9 de febrero
de 1970 fueron detenidos seis militantes, entre ellos Menéndez, tras colocar
una bomba en las oficinas del PAN)
Fueron reclutados César Germán y cuatro de sus amigos: Mario Sáenz, Carlos
Arturo Vives, Graciano Sánchez y Mario Sánchez. Sin razón aparente, tres meses
después, en mayo de 1969, Mario Menéndez les pidió que olvidaran el proyecto
porque faltaban recursos, pero estos jóvenes no se conformaron y con otros
miembros del grupo frustrado fundaron las Fuerzas de Liberación Nacional
el 6 de agosto de 1969. Así fue como decidieron emprender la revolución en el
territorio aislado que acababan de conocer.
Durante cinco años tejieron una red de un millar de simpatizantes,
colaboradores y militantes en Tabasco, Puebla, Estado de México, Chiapas,
Veracruz y Nuevo León.
Desde febrero de 1972, César Germán había establecido un campo de
entrenamiento en un campo de Ocosingo en Chiapas, que fue llamado “El Diamante”, destinado a formar la
Brigada Emiliano Zapata. El Financiamiento de las FLN era a base de cuotas de
la militancia y era un valor entendido que quienes entraban de tiempo completo
a la organización cedían sus posesiones materiales a favor de la misma..
La casa de seguridad de Nepantla, Estado de México, era conocida como “La casa grande”, principal punto de
reunión y abastecimiento de alimentos y medicinas de militantes en todo el
país. El 14 de febrero de 1974, ocurrió el enfrentamiento con las fuerzas de
seguridad. Casi seis horas duró el enfrentamiento en el que se usaron
granadas, morteros y ametralladoras, el saldo fue de cinco muertos por parte de
los militantes de las FLN.
La persecución se extendió hasta el rancho El Diamante, en donde fue herida de muerte Elisa Irina, hermana de
Mario Sáenz. Versiones periodísticas de la época aseguran que a mediados de
abril de 1974, el grupo sobreviviente encabezado por César Germán fue
aniquilado por el ejército mexicano en plena selva. Su hermano Fernando se
trasladó entonces a Chiapas y con una brigada lo buscó a él y a su grupo sin
fortuna.
Las FLN se repusieron y al frente quedó Mario Sáenz. En febrero de 1975 son
de nuevo golpeados por el ejército. Julieta Glockner, había quedado como
segunda responsable de todo el trabajo en las redes urbanas. Viajaba a Tabasco,
Monterrey, Puebla y la Ciudad de México. Ella y Graciano Sánchez son detenidos
a las afueras de Cárdenas, Tabasco. Tras una persecución son muertos a tiros en
unos campos de cultivos de cacao. Entonces Saénz designa al hermano menor de
César Germán, Fernando, para que asuma una de las responsabilidades de Julieta:
la de abrir de nuevo la ruta para entrar a la selva chiapaneca. Así lo hace.
Fernando sale de Chiapas y se amnistía en 1978. A principios él y Gloria
Benavides regresan al Estado con el nombre de Ejército Zapatista de Liberación
Nacional. En 1984 Rafael Sebastián Guillén, alias Marcos, un maestro de diseño
de la Universidad Autónoma Metropolitana de Xochimilco, se integraría junto con
nuevos cuadros, a la organización que un año después entraría en contacto con
la estructura de catequistas e indígenas de la diócesis de San Cristóbal de las
Casas.
Poema: Relación de hechos
“Hoy, día sexto del mes de agosto
del año mil novecientos sesenta y
nueve,
estando prevenida la historia, el
café amargo,
el tabaco por terminarse la tarde
por fenecer
y todo adecuado para conspirar
contra las sombras y tinieblas que
opacan el mundo y su sol,
los abajo firmantes comparecen ante
mí, la patria,
para declarar lo siguiente
PRIMERO.- Que los abajo
firmantes renuncian
a su hogar, trabajo, familia y
estudios
y a todas las comodidades que,
sobre la miseria de los más,
se han acumulado en manos de los
menos.
SEGUNDO.- Que los abajo firmantes
renuncian a un futuro,
vendido en abonos para disfrute
individual.
TERCERO.- Que los abajo firmantes
renuncian también a la coraza de
indiferencia
frente al sufrir de otros y a la
vanagloria
de un lugar entre los poderosos.
CUARTO.- Que los abajo firmantes
están dispuestos a todos los sacrificios
necesarios
para luchar calladamente y sin
descanso
para hacerme a mí, la patria, libre
y verdadera.
QUINTO.- Que los abajo firmantes
están dispuestos a padecer
persecución,
calumnias y torturas,
e incluso a morir si es preciso
para lograr lo señalado en el punto
Cuarto.
SEXTO.- Que yo, la patria,
sabré guardarles su lugar en la
historia
y velaré por su memoria
como ellos velaron por mi vida.
SÉPTIMO.- que los abajo firmantes
dejan bastante espacio debajo de sus
nombres
para que todo hombre y mujer
honestos
firmen este documento
y, llegado el momento, lo rubrique
el pueblo entero.
No habiendo más que decir y sí mucho
por hacer,
los abajo firmantes dejan su sangre
como ejemplo
y sus pasos como guía.
Heroica y Respetuosamente.
VIVIR POR LA PATRIA O MORIR POR LA
LIBERTAD
Manuel,
Salvador,
Alfredo,
Manolo,
María Luisa,
Soledad,
Murcia,
Aurora,
Gabriel,
Ruth,
Mario,
Ismael,
Héctor,
Tomás,
Alfonso,
Ricardo…
Y siguen firmas de los que habrán de
morir
y de los que habrán de vivir luchando
en este país de dolorosa historia
llamado México,
abrazado por el mar y, pronto,
con el viento a su favor.
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