"El Grito del Pueblo"
Mujeres luchando del POS-MAS
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¡BASTA
DE FEMINICIDIOS! ¡BASTA DE VIOLENCIA DE CUALQUIER TIPO HACIA LAS MUJERES Y
NIÑAS!
En México, de acuerdo a informes del Instituto Nacional de
las Mujeres, diariamente son asesinadas 7 mujeres y 63% de las mujeres han
vivido algún tipo de violencia; entre los estados en los que se registra mayor
violencia son Estado de México, Guerrero, Jalisco y Distrito Federal.
El feminicidio es el
último grado de violencia, el cual se ha extendido en todo el país y junto a
éste se ha incrementado la trata y la explotación sexual de mujeres. En nuestro
país, la trata de personas es el tercer negocio más lucrativo, la mayoría de
las víctimas son mujeres, pobres, inmigrantes y jóvenes; dejando ganancias de
hasta 32 mil millones de dólares anuales, según datos de la OCDE, beneficiando
no sólo a los grupos criminales, sino también a funcionarios y empresarios
cómplices.
Asimismo, otro tipo de
violencia es la laboral, pues cada vez más sufrimos la precarización laboral y
la super explotación. Un ejemplo de ello, son las mujeres jornaleras, en San
Quintín, Baja California, representando el 45% de este sector y quienes se
movilizaron junto con sus compañeros a inicios de este año en defensa de sus
derechos laborales, pues no tienen ningún tipo de prestación, ni seguridad
social, además de trabajar en situaciones inseguras e insalubres y de sufrir el
acoso sexual de los mayordomos. Otro ejemplo, son las trabajadoras del
Sindicato Único de Trabajadores de Calzado Sandak, quienes actualmente
representan a la mayoría en la lucha que lleva más de cuatro años en defensa de
sus derechos laborales, quienes han padecido la represión de la empresa y el
gobierno de Tlaxcala. También están las mujeres que laboran desarrollando
actividades de limpieza en condiciones de subcontratación, que cobran salarios
de 2500 pesos mensuales, sin prestaciones mínimas de ley y mucho menos
contratos colectivos.
Las maestras son otro
sector gravemente afectado, siendo una mayoría del magisterio, con la
imposición de la mal llamada reforma educativa, han sido afectadas sus familias
al precarizarse sus condiciones laborales y sufrir la represión por parte de
las autoridades educativas con la aplicación de evaluaciones punitivas que
ponen en riesgo su estabilidad laboral.
México es uno de los países
que ocupa uno de los primeros lugares en violencia hacia las mujeres, sin
embargo, los temas y necesidades urgentes de las mujeres no son de importancia
para el gobierno ni ninguno de los partidos oficiales. El gobierno se limita a
poner en escena farsas apegadas a las políticas internacionales de género, una
forma de desmovilizar a las mujeres y neutralizar su descontento.
Por ello, a Enrique Peña
Nieto poco le interesa lograr la equidad como ha declarado en conferencias de
la ONU, pues en programas como el de Salud Materna, Sexual y Reproductiva hay
una disminución presupuestal del 7.41%; en la cuestión de feminicidio, la mitad
del presupuesto asignado para operar la Alerta de Género no se ejerció en el
2014, sin que haya explicación por parte del gobierno del destino de los
recursos sobrantes. O el caso de San Luis Potosí, que en días pasados se exigía
mediáticamente la declaración de alerta de género en ese estado debido a una
ola de feminicidios en distintos municipios durante los últimos meses. El día
20 de noviembre se dio a conocer que el gobierno del estado ya había tramitado
la solicitud de alerta de género, no obstante, Federico Garza, titular de la
Procuraduría General de Justicia del Estado, declaraba que era innecesaria.
Asimismo, en el Estado
de México, después de la declaración de alerta de género, se cometieron 11
feminicidios en menos de dos semanas después de la declaración de alerta de
género.
De tal manera, que
denunciamos al Estado Mexicano como cómplice y verdugo de las mujeres, porque
son los gobernantes, representantes de la burguesía, quienes a través de la
imposición de sus políticas neoliberales de muerte nos empobrecen y crean las
condiciones para que la violencia hacia las mujeres aumente. Nos negamos a
aceptar que es una casualidad el aumento de la violencia hacia las mujeres. La
crisis capitalista es obra de la burguesía, pero el gobierno hace pagar a la
clase trabajadora por ella, no sólo en términos monetarios, sino con la vida y
cuerpo de las mujeres. La causa de la violencia hacia las mujeres es el sistema
capitalista y patriarcal en directa contradicción con la vida de las personas y
la liberación de las mujeres; por lo que medidas paliativas no solucionan nada.
Las mujeres debemos
continuar con la lucha por erradicar la violencia de la que somos víctimas, una
violencia que se impone desde el hogar, en las escuelas, en los medios de
comunicación, en las calles, en los centros de trabajo, en el campo y las
diversas instituciones del gobierno. Es decir, debemos emprender una lucha
contra una violencia estructural, que fomenta el propio Estado en contra de las
mujeres, principalmente contra las trabajadoras, las indígenas, las pobres, las
inmigrantes, pues esta violencia es la que le ha servido para someternos y
super explotarnos. Por lo que es necesario unificarnos y organizarnos,
conformando un Frente Amplio de Mujeres, como lo proponen las compañeras de la
Nueva Central de Trabajadores, que se proponga dar la lucha en unidad con
sindicatos, organizaciones sociales y políticas en defensa de nuestros
derechos. Es así, en la lucha junto con otros sectores de nuestra clase, como
podremos lograr la erradicación de esta violencia del Estado, de patrones, de
dirigencias corruptas.
¡Alto a los
feminicidios, a la trata y explotación sexual de las mujeres!
¡Castigo
a los feminicidas y proxenetas, a los funcionarios y gobernantes cómplices!
¡Rechazo a las
contrarreformas que precarizan nuestro trabajo!
¡Por
la organización y movilización de las mujeres trabajadoras en contra del
capitalismo patriarcal!
MUJERES LUCHANDO DEL POS-MAS
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