Por Comité Editorial
Carabina 30-30
Kaos en la red
El arma insignia de las tropas rebeldes durante la revolución
de 1910 fue la Carabina 30-30. En esa contienda el sector radical fue
derrotado, pero las clases populares lograron tatuar en la piel del régimen
posrevolucionario un compromiso social (plasmado en los artículos 3, 27 y 123
de la constitución de 1917) que fue siempre un obstáculo para el sistema, el
cual puso todos sus esfuerzos en diluirlo. Más adelante, la ‘democratización’
del sistema político sería acompañada de un viraje neoliberal que colocó el
compromiso social en un lejano segundo plano y subordinó el país al capital
extranjero, lo cual motivó al régimen hace poco a revertir la expropiación
petrolera. La guerra del narco es sólo un paso más hacia la barbarie, creada
por décadas de desorden neoliberal. De conjunto, los capitalistas han
aprovechado la desorganización de las clases trabajadoras para consumar su
proyecto político. Es hora de quitarle la sonrisa a la burguesía mexicana y
disputarle su pésima conducción del país. Las clases populares debemos
encontrar una nueva Carabina 30-30, la cual esta vez deberá tener objetivos
socialistas para poder llegar hasta el final.
Es necesaria una nueva
revolución; y para que esto ocurra, la alternativa revolucionaria debe
renovarse como una fuente de ideas acerca del mundo. Nuestra plataforma
editorial busca contribuir a esta tarea. Mujeres y hombres dispersos a lo largo
del país en los distintos organismos socialistas o en lo individual, desde hace
tiempo necesitamos un espacio en donde la radicalidad y la seriedad en el
análisis, la profundidad en la teoría y la sencillez en la exposición, puedan
conjugarse. La izquierda mexicana ha fallado en renovarse ideológicamente a la
par de los acontecimientos, quedando muchas veces encasillada en la nostalgia
del cardenismo, algunas limitada a una socialdemocracia incapaz de imaginar
siquiera una emancipación general, otras reducida a la repetición de un
marxismo dogmático, conservador (por ejemplo) frente a las propuestas
feministas y reticente a escuchar las voces femeninas.
30-30 se concibe como un
instrumento de esta renovación: uno que aboga por una unión entre teoría y
práctica, que se traduzca en una práctica radical razonada.
Sin más te damos la
bienvenida, esperamos tu participación.
Comentarios