Publicado por Red Latina
sin fronteras
11 de mayo de 2016
Ernesto Avelino Ramas Pereira desde 1975, actuó como
comandante en la OCOA en el “300 Carlos”
y, más tarde, en las operaciones de la cárcel de La Tablada. Poco después,
sirvió en el Comando General del Ejército. Sus alias fueron: Tordillo, Oscar 1, “El Gallego”, “Puñales” (Dagger). Reconocido en Orletti Argentina.
Fue parte de los grupos
que generaron una cifra de desaparecidos y asesinados aún sin un número preciso
en el área que operó el Plan Cóndor.
Operó en la casa de
torturas de Punta Gorda el Infierno Chico.
Está vinculado a la
desaparición de Simón, en la desaparición de Adalberto Soba y Alberto Mechoso,
Gerardo Gatti y León Duarte… También está implicado en la desaparición de
Washington Barrios, en el asesinato de Silvia Reyes, asesinada el 21 de abril
de 1974 junto a Diana Maidanick y Laura Raggio. El 27 de octubre de 2011, fue
procesado por el homicidio particularmente agravado de María Claudia García y
por sustracción de menor y supresión de estado civil en el caso de Macarena.
CULPABLE DE TORTURA, DESAPARICIÓN FORZADA, ASESINATO. SI EL ESTADO LO DEJA IMPUNE, EL PUEBLO LO CONDENA Y REPUDIA. |
Su prontuario es extenso,
sin embargo el 24 de diciembre de 2015 el juez Gesto le otorga la prisión
domiciliaria. Ramas fija su domicilio en Piriápolis, y es ahí donde lo
ubicamos, sentado tranquilamente tomando mate en el frente de su casa con total
impunidad.
Por todo ello estamos
preparando un escrache y una caravana por la justicia que partirá desde
Montevideo rumbo a Piriápolis.
¡BASTA DE IMPUNIDAD!
¡JUSTICIA POPULAR!
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