Trabajadores de Uniroyal, despedidos masivamente en 2000, luchan para no ser despojados de sus bienes sindicales
Después
de traicionarnos: ¡La CTM pretende despojarnos de nuestros bienes sindicales!
Los trabajadores de Uniroyal, que sufrimos
el cierre ilegal de nuestra fuente de trabajo el 4 de agosto del año 2 mil, por
parte de la transnacional francesa Michelin, la número 1 en producción de
llantas a nivel mundial, con la descarada colaboración de nuestros supuestos
representantes y del asesor jurídico, Juan Moisés Calleja, denunciamos la
pretensión de la corrupta central oficialista por excelencia, la Confederación
de Trabajadores de México (CTM), de adueñarse ilegalmente de nuestras
instalaciones sindicales, el único patrimonio que pudimos rescatar.
No
conformes con firmar el cierre de la planta, de amenazarnos con que si no
cobrábamos las indemnizaciones quedaríamos a la deriva, sin pago alguno, los
integrantes del Comité Ejecutivo de nuestro sindicato pretendían apropiarse de
nuestros bienes sindicales: los edificios pagados con nuestras cuotas, ubicados
en el barrio de la colonia Huichapan en el D.F. y en Querétaro. Incluso
llegaron al punto de armar con metralletas a un grupo para amedrentarnos, en
nuestras propias instalaciones, en marzo del 2001, cuando les exigíamos cuentas
de su firma del cierre de la planta.
Además,
firmaron con anticipación, al cierre un contrato de protección patronal a favor
de la transnacional francesa, para reabrir su planta de Querétaro, con
condiciones de miseria y sin ningún derecho para los nuevos trabajadores y
trabajadoras, lo que les da la oportunidad de trabajar sin cumplir con el
Contrato Ley de la Industria, súper explotando a los nuevos trabajadores.
Y ahora,
14 años después pretenden nuevamente apoderarse de lo que no es suyo, con la
colaboración de un grupo de traidores, convocando a una supuesta Asamblea General
en la CTM de Querétaro, a la que por fortuna no asistieron más de 5 compañeros.
Por ello nuevamente denunciamos el papel traidor y entreguista de la CTM y a
quienes le sirven como vasallos, para apoderarse de nuestros bienes sindicales.
Esos bienes deben ser vendidos, para repartir los escasos beneficios entre
quienes somos sus legítimos propietarios: los ex trabajadores de Uniroyal, que
nos manteníamos activos hasta el cierre de la fábrica, los 650 trabajadores que
sufrimos el despido masivo por parte de la patronal.
Por lo
anterior repudiamos la nueva intromisión de la CTM en nuestro proceso de liquidación
de los bienes sindicales, exigiendo que no entorpezca el ya de por sí difícil
proceso de venta de los bienes, pues está claro que de nueva cuenta pretenden
apropiarse de lo que no es suyo.
¡Fuera
la CTM de Uniroyal!
Atentamente:
La Comisión Liquidadora de los bienes del
SUNTU:
Arnulfo
González Nieto,
Mario
Alberto Blas,
Sergio
Romero Moreno,
José
Hernández Martínez,
José
Luis Jiménez Hernández,
José
Luis Sánchez Salinas
Firmas de apoyo:
Por favor, si estás de acuerdo en apoyar la
lucha de los compañeros de Uniroyal en defensa de sus bienes sindicales, envía
tu adhesión o un mensaje solidario a los
siguientes correos:
Un poco de Historia:
El siguiente escrito,
publicado en agosto de 2013 aquí mismo, hoy adquiere nueva relevancia ante la
denuncia que hacen los compañeros de la Comisión Liquidadora de los bienes
del Sindicato Nacional de Trabajadores de Unirolyal, pues ello dará mayor
claridad a l@s lector@s del largo proceso histórico de traiciones que la
padecido este sector de la clase obrera, del papel de traición que ha jugado el
sindicalismo oficial y de la resistencia que sostienen los trabajadores conscientes.
(La
Voz del Anáhuac)
México: Los trabajadores en resistencia de Uniroyal comparten la
historia de su sindicato
SINDICATO
NACIONAL DE TRABAJADORES DE UNIROYAL
Antecedentes
La historia de lucha de los trabajadores de la
industria hulera se remonta a los años treinta. Para los obreros abuelos no fue
fácil lograr el reconocimiento de los sindicatos que hasta el 23 de febrero de
1935 lograron como consecuencia de sus luchas contra las patronales el
reconocimiento del: Sindicato de
Trabajadores de la Industria Hulera Tornel y Garza S.A, (abuelo del Sindicato Nacional de Trabajadores de
Uniroyal S.A) en esa misma época de lucha se constituyó el Sindicato Unión Sindical de los Trabajadores de Euskadi.
De 1934 a 1939 se dan las movilizaciones obreras más
intensas en la historia de México con la
participación de los obreros de la Industria Hulera, destacando su importancia.
En 1935 se conforma el Comité Nacional de Defensa Proletaria (CNDP) con la tarea de organizar un congreso obrero y campesino
para conformar la Central
Nacional de los Trabajadores de la
Ciudad y el Campo, esto desembocó en la creación de la CTM en 1936 y que proclamó la independencia ante los partidos
burgueses y sus gobiernos logrando
conjuntarse 500 mil trabajadores, excluyendo a los campesinos ya que el
presidente General Lázaro Cárdenas
lo impidió, el general dijo que su gobierno, “considera el deber de organizar a
los campesinos” el problema no fue
Lázaro Cárdenas sino los líderes
de la CTM que lo permitieron. El nacimiento de la CTM fue creada por el impulso de miles
de obreros, entre los que destacaron los Sindicatos de las Industria Hulera .
La
CTM había nacido con un gran cáncer: Sus líderes. De las que se desprenden tres
corrientes: Lombardo Toledano,
quien empleaba un lenguaje demagógicamente marxista,
pero recibía abiertamente financiamiento del gobierno. La otra corriente la
conformaban Fidel Velázquez y Jesús Yurén quienes eran miembros del Partido Nacional Revolucionario (abuelo del PRI) que eran abiertamente gobiernistas y recibían apoyo directo de Cárdenas y la tercer corriente eran
los Comunistas.
En 1936 los 45 mil trabajadores ferrocarrileros
lanzan una huelga que fue declarada inexistente por la Junta Federal de
Conciliación y Arbitraje, es decir por el gobierno del General Cárdenas. Esto
obligó a la CTM a estallar un paro nacional el 18 de junio que es la última
huelga general en México. La máxima expresión de estas luchas obreras fue
cuando los trabajadores Petroleros
conquistaron la Expropiación Petrolera,
medida que le fue impuesta por éstos a Cárdenas
ya que no estaba entre sus planes.
Después de la Expropiación Petrolera, Cárdenas se
volcó contra los trabajadores que al no poder hacerlo de una manera directa y
policial, decidió degenerar la CTM a través de Lombardo Toledano y Fidel
Velázquez, proclives a Cárdenas, éstos lograron que la CTM, pasara a formar
parte al partido oficial (Partido de la
Revolución Mexicana, que luego cambió a
PRI).
Surgimiento del Contrato Ley
En 1938 el Sindicato de Trabajadores de la Industria Hulera Tornel y Garza, junto
con otros sindicatos de la Industria Hulera logran constituir La Coalición de Sindicatos de la Industria Hulera. Como primera acción, ese mismo año logran imponer
a los patrones, tras una huelga de tres días el “Contrato Ley de la Industria de
la Transformación del Hule” que supera a un simple contrato colectivo.
De 1939 a 1957 la mayoría de los sindicatos
permanecieron desmovilizados debido al control que la CTM ejercía sobre ellos,
para 1959 el Sindicato Nacional
Revolucionario de Trabajadores de
Euzkadi decide abandonar esta central y pasa a ser independiente.
En junio de 1940 el Sindicato de Trabajadores de la Industria Hulera Tornel
y Garza (abuelo del Sindicato Nacional de Trabajadores de
Uniroyal) se convierte en Sindicato
Trabajadores de la Compañía Hulera Mexicana S.A, la nueva patronal ahora
era la Compañía Hulera Mexicana S.A.
En 1946 la Compañía
Hulera Mexicana S.A es adquirida por la trasnacional U.S Rubber Mexicana S.A, con plantas de producción en Veracruz,
Monterrey, Guadalajara y Sonora, el sindicato pasa a ser Sindicato de Trabajadores de la
U.S Rubber Mexicana S.A. En 1967
la compañía U.S Rubber Mexicana
S.A cambia a Uniroyal S.A. En
1968 pasa a ser de sindicato de empresa a sindicato nacional de industria y el
nuevo nombre es Sindicato Nacional de Trabajadores de Uniroyal S.A, ya que en ese
mismo año se abrió la planta de producción Uniroyal
S.A en la ciudad de Santiago de Querétaro. En las siguientes décadas y bajo
el control de la CTM, La Coalición de Sindicatos de la Industria
Hulera fue el medio por el cual los sindicatos huleros fueron cediendo a
los intereses de las patronales casi en su totalidad trasnacionales.
En el caso de Uniroyal, las dirigencias cetemistas aceptaron cambios
sustanciales en los sistemas de trabajo, a
través de cláusulas de productividad, privatización de servicios,
desmedido aumento en los estándares de producción y trabajo a jornada reducida,
siendo la empresa que tuvo una mayor producción de llantas en el país
considerando el reducido número de sus trabajadores. Las direcciones sindicales
de Uniroyal estuvieron siempre bajo el mandato de la corrupta CTM, salvo en
contadas excepciones como fue el caso de Germán Espinosa y Miguel Ángel Rojas,
que entablaron varias huelgas por violaciones al Contrato Ley pero que cayeron traicionados por Fidel Velázquez y su
asesor el famoso 'ministro' Juan Moisés
Calleja.
Conclusión:
Así, en plena época
neoliberal, se facilitó a la patronal maniobrar de acuerdo a sus intereses y,
coludida con los charros de la CTM, decidió el cierre ilegal y el despido
masivo de los trabajadores de Uniroyal el 4 de agosto del 2000.
Los trabajadores de Uniroyal, además del cierre
ilegal de su fuente de trabajo por parte de la transnacional francesa Michelin,
con la descarada colaboración de los líderes sindicales y su asesor jurídico,
Juan Moisés Calleja, presionaron a los trabajadores a cobrar sus liquidaciones,
muy por debajo de lo que marca la ley.
Ante esto, los trabajadores, despojados de su
fuente de trabajo, conscientes de que ya sólo les quedaban los bienes
sindicales (los edificios sindicales del DF y Querétaro), constituyeron la
Comisión Liquidadora, pero incluso éstos les pretendieron arrebatar los charros
de la CTM. En marzo 2001, un grupo armado de metralletas pretendió intimidarlos
para desalojar el edificio de la colonia Huichapan, tomado por la Comisión
Liquidadora, actualmente única con representación legal de los ex trabajadores
de Uniroyal. No lograron su objetivo los charros. La Comisión Liquidadora,
mientras se lograra la venta de los bienes sindicales para que el producto de
la venta de los edificios se distribuyera entre los trabajadores con legítimo
derecho, es decir, los que permanecían activos hasta el cierre de la empresa y
despido masivo, pues dichos bienes fueron adquiridos con sus cuotas sindicales.
La Comisión Liquidadora ha resistido, desde
entonces, las pretensiones de despojo total por parte de la corrupta CTM. Hoy,
nuevamente los charros cetemistas, pretenden adueñarse de los bienes sindicales
de los ex trabajadores de Uniroyal.
Impedir esto es tarea de los trabajadores
conscientes que siguen resistiendo. Es en este esfuerzo que solicitan nuestra
solidaridad, firmando el documento que abre esta publicación.
La Voz
del Anáhuac (Colectivo
Azcapotzalco adherente a la Sexta), conocemos la historia de resistencia de
los compañeros de Uniroyal y desde aquí, sin duda alguna, manifestamos nuestra
total solidaridad con los compañeros de Uniroyal en lucha contra el despojo de
sus bienes sindicales.
(La Voz del Anáhuac)
Por favor, si estás de acuerdo en apoyar
la lucha de los compañeros de Uniroyal en defensa de sus bienes sindicales,
envía tu adhesión o un mensaje solidario
a los siguientes correos:
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