Lo que era verdad ayer.
Hoy resulta ser mentira.
Ahora arde en una pira.
Lo que nunca pudo ser.
|
Publicado por Guerrilla
Comunicacional México
cm 23.10.2014
El lema de la UANL dice
en latín:
“Que arda la flama de la verdad”.
Pienso en hacer un
pasaje, un desliz:
del lema a una demanda
aguerrida,
en estas circunstancias
que arrastramos-
desde la Guerra Sucia
hasta el “no pasa nada”,
del eufemismo “Guerra contra el narco”
(who is the narco?,
explain me,
sounds like “el
coco” or “el señor del costal”,
i don´t belive in
public enemies,
that’s for comics or
security policys in state logic)
hasta el sonoro “ya se compuso la cosa con el Peña”
(ajá, ya tu sabe que eso
e falsedá a punta de pistola)-
esas violencias que se han
diversificado y especializado,
al punto de censurar,
generar un clima de habituación
y lo que llamo “agachamiento de cabeza”,
cual siervo ante su amo,
estas que hacen arder de
frustración
a quienes intentamos tener
acceso a la justicia
y lo que hemos
conseguido por parte del Estado
(en sentido amplio, no
sólo incluyendo gobierno actual),
en el mejor de los casos
ha sido una angustia tremenda,
frustración que quiebra
dientes y sueños.
No obstante, ardemos en
otro sentido,
por el ímpetu, la
pasión, el trabajo de búsqueda,
la rabia, el proceso de
reconstrucción y reflexión.
No nos agotamos,
como el fuego,
avanzaremos en la adversidad
sí continuamos insistiendo en el acceso a la
verdad,
las verdades de cada
caso en su proceso de acceso a la justicia,
exigimos que arda la
flama de la verdad,
pero no sólo en los
casos de los 43 estudiantes,
sino de todxs:
lxs afectadxs,
lxs desaparecidxs,
lxs asesinadxs,
las víctimas de
feminicidios,
los víctimas de
homicidios,
lxs explotadxs,
lxs extorsionadxs,
lxs forzadxs,
lxs silenciadxs,
lxs caídxs,
lxs desplazadxs,
lxs parias,
lxs marginadxs,
lxs estigmatizadxs,
lxs desarraigadxs de su
identidad,
de su tranquilidad por este Necroestado
(ver Necropolítica de
Achille Mbembe);
nosotrxs,
quienes algunxs se han
dejado atropellar por el terror,
otrxs que prefieren “mantenerse al margen” (can they?),
están lxs defensorxs a
ultranza succionadorxs del Estado
(oral fixation-dependence),
otrxs que prefieren la
revolución en lugar de la barbarie
provocada por el
supuesto progreso del Estado,
esto no se trata de
reformitis,
que cambia todo para no
cambiar nada
(preserve the status quo).
¡Exigimos con el cuerpo,
con nuestrxs cuerpos,
esos de los que también
nos han expropiado,
como de nuestras
historias, identidades,
territorios, de nuestrxs
lazos y relaciones!
Exigimos desde nuestras
condiciones particulares, ¡JUSTICIA!,
queremos salir, convivir
entre nosotrxs,
confianza para
relacionarnos,
no armas, no guerra, no
más burocracia,
no más programitis sin
diagnósticos
con una caricaturización
y estereotipia de
“la población” objetivo de atención
planeada y ejecutada
(muchas veces) por discapacitadxs sociales
(excluyo de esto a
funcionarixs que se entregan,
que están ahí como
granos de ajonjolí),
no queremos más de eso.
Queremos nuestrxs seres
queridxs, nuestrxs calles transitables,
nuestra libertad para
pensar,
pues más bien procedemos
desde la creencia y el pensamiento mágico,
pensar, para empezar,
incluye el recuperar la capacidad para sentirnos,
para pensarnos, criticarnos,
cuestionar, dudar;
para decir, para
converger, para discutir libremente,
para poder escucharnos,
para leernos y construir,
construir y deconstruir
colectivamente, actos cocreativos.
Hoy retomo el lema de mi
alma mater,
no porque crea en una “verdad uni-versal”
(menos una de tipo
universitaria),
sino porque es
importante que ardan nuestras verdades
pero que no se quemen,
sino que ardan a flor de
piel,
que no queden olvidadas,
que no sean minimizadas,
que no sean reducidas a
una coyuntura,
sino que sea llama viva,
una exigencia de
justicia continua.
Comentarios