12 de septiembre de 2015
Fuente: http://www.pozol.org
Con información del
Grupo de Trabajo No Estamos Todos.
Chiapas México. “Hoy
10 de septiembre a la 1 de la madrugada, nuestro compañero Alejandro Díaz
Santis, Solidario de la Voz de Amate, junto con otros presos, los llevaron a un
traslado sin su conocimiento sin saber a qué se debe”, informaron indígenas
presos en el penal N° 5 de San Cristóbal de las Casas, Chiapas.
Roberto Paciencia Cruz,
Lucio Hernández Patishtán y Juan de la Cruz Ruíz, también recluidos en el Penal
de Los Llanos, como también se le conoce a la cárcel de San Cristóbal,
denunciaron mediante un comunicado la ausencia de su compañero Díaz Santis y
los demás reclusos. “Invitamos a las
organizaciones independientes estatales, nacionales e internacionales a sumarse
a nuestra situación de exigir el regreso de este centro, a nuestro hermano de
lucha”, añadieron los indígenas de los Altos de Chiapas.
El indígena tzotzil
Alejandro Díaz Santis, originario de Tzoeptic municipio de Mitontic, es
integrante de la organización Solidarios de la Voz del Amate, adherente a la
Sexta Declaración de la Selva Lacandona del EZLN, y se ha caracterizado por
evidenciar violaciones de derechos humanos dentro del penal número cinco.
Alejandro fue detenido
por la policía judicial en Veracruz en 1998. Los agentes que lo detuvieron no
mostraron identificación ni orden de aprehensión. Tampoco le dijeron el motivo
por el cual lo detenían. De ahí fue conducido al Ministerio Público. Mientras
estuvo detenido en el Ministerio Público recibió golpes, puñetazos y patadas,
también le golpearon la cabeza con la cacha de una pistola y gasearon sus ojos.
En ningún momento pudo comunicar con nadie mientras estuvo detenido. Alejandro
no participaba en ninguna organización cuando fue apresado.
El mismo día de la
detención se le tomó declaración en el Ministerio Público. No tuvo abogado
defensor ni un traductor adecuado. No le leyeron la declaración, por lo tanto
no estuvo de acuerdo con ella. Firmó la declaración por la presión de la
tortura y el miedo a que se repitiese. Del Ministerio Público fue trasladado al
CERSS Ignacio Allende de Veracruz bajo la acusación de homicidio y violación.
Después de
aproximadamente una semana de su reclusión se le dictó auto formal de prisión.
Lo sentenciaron a 30 años de prisión, de los cuales lleva cumplidos 17.
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