Asamblea en
defensa del territorio, Cuetzalan, Puebla
(Foto: La
Jornada de Oriente)
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La lucha del pueblo
cuetzalteca por evitar la actividad minera en su región obtiene sus frutos.
Asamblea en defensa
del territorio, Cuetzalan, Puebla.
Martín Hernández A.
Jornada de Oriente
La Jornada Oriente. Abril 8, 2014. Cuetzalan del Progreso,
Puebla.- Un nuevo argumento de peso: Petróleos Mexicanos (Pemex), la empresa
más importante del país, ha reconocido que al Programa de Ordenamiento
Ecológico Territorial de Cuetzalan (POET) solo autoriza actividades
concernientes a la microindustria y pequeña industria, por lo que acciones de
exploración y producción de hidrocarburos, y por ende de minerales, está
prohibida.
El POET es uno de los
componentes del Ordenamiento Territorial Integral de Cuetzalan, siendo el otro
el programa de ordenamiento urbano.
El reconocimiento del
Ordenamiento Territorial Integral de Cuetzalan como un instrumento legalmente
normativo fue hecho por la paraestatal en el Manifiesto de Impacto Ambiental
(MIA) dado a conocer a través de la Gaceta Ecológica del 13 de marzo del
presente año publicada por la Secretaría del Medio Ambiente y Recursos
Naturales (Semarnat) respecto e ingresada por Pemex Exploración y Producción,
para solicitar la autorización ambiental del “Proyecto Regional Petrolero Poza Rica–Alta Mira y Aceite Terciario del
Golfo 2013–2035, con clave 30VE2014X0008”.
Como lo indica el MIA,
dicho proyecto es continuidad del “Proyecto
Integral Activo Poza Rica 2001–2016” y del “Proyecto Zona Norte de Chicontepec”, ambos autorizados por la
dependencia federal de manera condicionada en 2002 y 2005 respectivamente.
El texto de la MIA fue
transcrito y analizado por el Comité del Ordenamiento Territorial Integral de
Cuetzalan (COTIC), y forma parte de un informe que dicho organismo entregó este
fin de semana al presidente de ese municipio, el panista Óscar Paula Cruz
La parte nodal de lo que
la MIA de Pemex implica, se transcribe a continuación:
“El mencionado proyecto traza un polígono de 2 millones 235
mil 224.15 hectáreas entre Hidalgo, Veracruz y Puebla sobre 99 municipios,
incluido el territorio de Cuetzalan, para la realización de diversas
actividades vinculadas a la exploración y producción de hidrocarburos y gas
natural. Para estas obras Pemex estima que sería afectado el suelo de un total
de 16 mil 436.9 hectáreas. No obstante, desconocen las áreas puntuales a
afectar a través de las obras, ya que están en función del comportamiento de
las estructuras de interés para explotación.
“El proyecto refiere la intención de explotar y explotar pozos
de gas natural no convencional, lo que implica su extracción a través de la
técnica de fracking, sin mencionar las coordenadas precisas de dichos puntos.
“El fracking es una
técnica de extracción de hidrocarburos en yacimientos de lutitas, pizarra o
esquisto que se realiza a partir de la inyección de un fluido (agua con una
mezcla de más 700 sustancias químicas altamente tóxicas) a alta presión con el
propósito, de fracturar la roca impermeable en que se encuentran los
hidrocarburos.
“En la MIA se hace mención del vínculo del proyecto con
instrumentos de planeación y ordenamientos jurídicos aplicables. Refiere al
artículo 133 Constitucional para mencionar que el proyecto acatará en todas y
cada una de sus etapas los tratados y convenios internacionales en materia
ambiental y demás aplicables en los cuales México sea participe, pero no hace
mención de la reforma al artículo Segundo Constitucional hecha en 2011, en la
que se privilegia el cumplimiento de los tratados firmados por México
relacionados a Derechos Humanos”.
“Es de destacarse que
la paraestatal reconozca la importancia de velar por el cumplimiento del
Convenio 169 de la OIT, sin embargo la manera en que plantea resolver sus
indicaciones violenta al propio Convenio, pues menciona que el promovente (Pemex) es la obligada a realizar la consulta a los
pueblos indígenas, lo cual viola los procedimientos de consulta que establecen
que es obligación del Estado (no de una empresa, aunque sea paraestatal), el consultar a los pueblos indígenas, de
manera libre, previa e informada.
“El estudio se refiere a varios planes de desarrollo estatales
y municipales para justificar su armonía con el proyecto. El empleo y el
desarrollo económico son los argumentos centrales para evidenciar coadyuvancia
del proyecto con la región. Pero esto no ocurre así en la realidad para el
fracking, técnica que ha presentado una seria oposición, sobre todo por sus
efectos nocivos para la naturaleza y la población, pero también por sus
adversos efectos económicos. Algunos de estos daños ya han sido bastante
documentados, entre los que se reportan el agotamiento o contaminación de los
acuíferos, lo cual es saldado por los pueblos y comunidades que ven violado su
Derecho Humano al Agua. Al verse contaminada el agua, la salud de la población
se ve vulnerada. La disposición inadecuada de residuos y las emisiones de gases
de efecto invernadero son otros de los costos que la industria no absorbe”, advierte el COTIC.
Y recalca: “es de hacer notar que la MIA presentada
por Pemex enumera Ordenamientos Ecológicos Territoriales involucrados en el
desarrollo del proyecto, dentro de los cuales ubica al General del Territorio,
de la Cuenca del Río Bobos y del Río Tuxpan, el Ordenamiento Ecológico
Territorial de Puebla e Hidalgo y el Ordenamiento Ecológico Territorial de
Cuetzalan. Este último representa un importante elemento de análisis. La MIA
reconoce que el Ordenamiento Ecológico de Cuetzalan, establece lineamientos y
restricciones permitiendo únicamente la microindustria y pequeña industria, lo
que es retomado de los criterios de regulación ecológica, que aplican al sector
industria, artesanía y comercio”.
El documento presenta un
mapa en el que se evidencian las zonas que Pemex pretende utilizar y cómo el
polígono correspondiente a Cuetzalan, queda resaltado como vedado a cualquier
actividad de la empresa:
“El mapa anterior muestra un análisis realizado por el
promovente sobre los ordenamientos vigentes, que expresa áreas geográficas que
restringen la actividad propia del proyecto. Nótese el señalamiento para todo
el polígono de Cuetzalan. El ordenamiento citado por la propia paraestatal es
contundente en la prohibición de cualquier actividad del proyecto, por lo cual
debería estar ausente del polígono de Pemex Exploración y Producción. En
resumen, el cambio de uso de suelo y los permisos para exploración de hidrocarburos,
no pueden realizarse en el municipio de Cuetzalan del Progreso. Es por esto que
resulta indispensable que las autoridades municipales y los habitantes conozcan
y comprendan la problemática expresada. Pero además, es importante entender que
el territorio municipal de Cuetzalan es un componente de una multiplicidad de
territorios de carácter geográfico, hidrológico, social y ambiental, de los
cuales depende para que sus habitantes gocen de un bienestar colectivo. Esto
indica que el impacto de las obras es de carácter regional, y aunque no realice
ninguna acción dentro del municipio de Cuetzalan, no significa que evite su
afectación. Ante ello, el COTIC ha ingresado una solicitud ante la Semarnat
para una reunión pública informativa del proyecto”, finaliza.
Cabe recordar que el
pasado fin de semana integrantes del Comité de Ordenamiento Territorial
Integral de Cuetzalan (COTIC) y el edil de ese municipio serrano, Óscar Paula
Cruz, se manifestaron en contra de la apertura de la apertura de una mina del
grupo Autlán en esa región de la Sierra Nororiental poblana.
El munícipe de extracción
panista aseguró que no dará ningún tipo de permiso para exploración o
extracción de minerales, el organismo solicitará formalmente al cabildo
cuetzalteca una sesión abierta para que el máximo órgano de gobierno municipal
haga oficial la oposición a tales proyectos.
“El tema es preocupante, efectivamente, porque estos proyectos
no benefician a la población porque son monopolios, son grupos que
desgraciadamente lo único que buscan es un beneficio, es enriquecerse: el más
rico más rico y el más pobre mucho más pobres. Estos proyectos nunca van a
ayudarnos. Si bien es cierto que dicen que van a industrializar y van a hacer
que tengamos mayores recursos, más empleos y oportunidades de trabajo,
desgraciadamente en la práctica acabarían con el poco medio ambiente que aún
nos queda, y ese es un tema que nosotros lo entendemos perfectamente”, aseguró.
Además, la semana pasada
se presentó un punto de acuerdo por la bancada del Partido Movimiento Ciudadano
(PMC) en la Cámara de Diputados federal, en la cual propone defender los
recursos naturales y de salud de los habitantes de la región de Cuetzalan del
Progreso y Tlatlauquitepec, perjudicados o amenazados por las compañías mineras
que tienen en concesión más de mil 500 hectáreas de territorio.
El proyecto fue planteado
por Zuleyma Huidobro González, representante popular de Puebla por la vía
plurinominal, y por el coordinador de la fracción parlamentaria del instituto
político de izquierda, Ricardo Monreal Ávila.
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